No me gusta el verano a pesar de que provengo de una de las ciudades más cálidas de Perú, Sullana. Allá es verano todo el año. Nadie me cree que no he ido a Máncora. Toda la primaría y la secundaria estudié en el colegio “Santa Úrsula” de Sullana. Al terminar, me mudé a Lima donde seguí la carrera de “Dirección y realización de cine y tv” en el instituto Charles Chaplin y he llevado cursos de fotografía y retoque fotográfico en el IPAD (Instituto Peruano de Arte y Diseño). Creo que la primera foto que tomé fue a mis padres en un viaje familiar, de esos que ya no se dan. Era en medio de la naturaleza, el encuadre aberrante y el ángulo contrapicado (por obvias razones a mis cuatro años de edad). Después de más de veinte años me siguen gustando los encuadres así. La primera vez que dirigí a alguien fue a mi madre, cuando le pedía que representara los cuentos que me narraba y le decía que por favor los “mezclara”, porque ya sabía todos de memoria. Mis propias historias las invento desde que tengo memoria; aún conservo algunos cuadernos de cuando apenas había aprendido a escribir y ya ponía en papel en letras e imágenes lo que creaba en mi mente.
A pesar de haber pensado en carreras como medicina veterinaria, antropología, filosofía, arqueología, paleontología y literatura, opté por estudiar cine, porque una de mis mayores pasiones es escribir historias y me encantaría verlas no solo en libros, sino también en una pantalla.
Siento que aún no encuentro mi propio estilo de fotografía y eso me frustra. Por ahora lo que más me gusta fotografiar son paisajes, retratos al aire libre, animales y conciertos.
Otra cosa que amo es la música, sobre todo el rock progresivo y música tradicional de diversas partes del mundo. En realidad, amo muchas cosas, entre ellas la cocina (Si además de fotos desean postres también pueden llamarme. No es broma), los idiomas, la naturaleza, la pintura (estoy retomándolo después de muchos años), caminar por calles que no conozco y el café.
Ahora me encuentro haciendo un documental web sobre los inicios del rock peruano, el cuál está en post-producción y por si acaso, estamos en busca de financiamiento. Además, soy la Coordinadora de Audiovisuales del FIMA (Festival Internacional de Música de Alturas).
No me gusta el verano a pesar de que provengo de una de las ciudades más cálidas de Perú, Sullana. Allá es verano todo el año. Nadie me cree que no he ido a Máncora. Toda la primaría y la secundaria estudié en el colegio “Santa Úrsula” de Sullana. Al terminar, me mudé a Lima donde seguí la carrera de “Dirección y realización de cine y tv” en el instituto Charles Chaplin y he llevado cursos de fotografía y retoque fotográfico en el IPAD (Instituto Peruano de Arte y Diseño). Creo que la primera foto que tomé fue a mis padres en un viaje familiar, de esos que ya no se dan. Era en medio de la naturaleza, el encuadre aberrante y el ángulo contrapicado (por obvias razones a mis cuatro años de edad). Después de más de veinte años me siguen gustando los encuadres así. La primera vez que dirigí a alguien fue a mi madre, cuando le pedía que representara los cuentos que me narraba y le decía que por favor los “mezclara”, porque ya sabía todos de memoria. Mis propias historias las invento desde que tengo memoria; aún conservo algunos cuadernos de cuando apenas había aprendido a escribir y ya ponía en papel en letras e imágenes lo que creaba en mi mente.
A pesar de haber pensado en carreras como medicina veterinaria, antropología, filosofía, arqueología, paleontología y literatura, opté por estudiar cine, porque una de mis mayores pasiones es escribir historias y me encantaría verlas no solo en libros, sino también en una pantalla.
Siento que aún no encuentro mi propio estilo de fotografía y eso me frustra. Por ahora lo que más me gusta fotografiar son paisajes, retratos al aire libre, animales y conciertos.
Otra cosa que amo es la música, sobre todo el rock progresivo y música tradicional de diversas partes del mundo. En realidad, amo muchas cosas, entre ellas la cocina (Si además de fotos desean postres también pueden llamarme. No es broma), los idiomas, la naturaleza, la pintura (estoy retomándolo después de muchos años), caminar por calles que no conozco y el café.
Ahora me encuentro haciendo un documental web sobre los inicios del rock peruano, el cuál está en post-producción y por si acaso, estamos en busca de financiamiento. Además, soy la Coordinadora de Audiovisuales del FIMA (Festival Internacional de Música de Alturas).